Conversatorio abordó la perspectiva de género y su trasversalidad en el currículo, con miras a lograr una educación más igualitaria y no sexista
Compartir experiencias sobre la perspectiva de género, con miras a lograr una formación más justa, igualitaria y no sexista, fue el objetivo del conversatorio al que convocaron las Escuelas de Enfermería y de Educación Parvularia de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valparaíso.
El encuentro se desarrolló en el marco de la ejecución de un proyecto de investigación sobre la percepción de docentes y estudiantes de ambas carreras respecto de la transversalización del enfoque de género y su aplicación en el currículo, y dio inicio al proceso de socialización de la etapa de aplicación de los instrumentos de recolección de información que considera esta iniciativa.
En la actividad expusieron la académica del Departamento de Pedagogía de la Universidad de Valladolid (España), Yasna Pradenas; la investigadora del Observatorio de Género de la UTFSM, Pamela Soto, y el encargado del Área Masculinidades de la Dirección de Igualdad y Diversidad UV, Hernán Silva.
Previo a su intervención, las profesoras Sandra Sánchez y Carola Cacciuttolo, de Educación Parvularia, dieron a conocer los lineamientos generales y las diferentes fases del proyecto, en representación del equipo de investigadoras que también integran las docentes Francisca González y Paulina Gundelach, de Enfermería.
Acciones y desafíos
Tras una breve introducción realizada por la profesora Francisca González, el conversatorio giró inicialmente en torno a la pregunta de cómo abordar la transversalidad de género en la educación superior.
La primera en hacer uso de la palabra fue Pamela Soto, quien sostuvo que este propósito está vinculado —en su opinión— a la necesidad de avanzar de manera más decidida hacia la democratización de los espacios que se dan en este ámbito y, en particular, en lo concerniente al reconocimiento de la justicia, entendido esto último como la forma de redistribuir el poder en una sociedad que sigue estando dominada por una visión patriarcal y capitalista.
Si bien explicó que en Chile se ha avanzado en este tema, la investigadora del Observatorio de Género de la UTFSM advirtió que, lamentablemente, aún no se ha entrado al fondo de la discusión, en el sentido de comprender que la variable de sexo, los determinantes de género y sus diversas manifestaciones, son parte de una propuesta civilizatoria que va más allá de lo meramente normativo.
Una postura similar expresó Yasna Pradenas, quien comentó que la transversalidad de género favorece el pensamiento crítico y que, por tanto, hace falta diseñar y aplicar políticas públicas que contribuyan a hacer mucho más permeable la educación superior al enfoque de género. Asimismo, la académica del Departamento de Pedagogía de la Universidad de Valladolid planteó que la transversalización corresponde a un nivel macro y, por consiguiente, debiera estar incluido en las estrategias que buscan promover la equidad de género, no solo en la educación sino en todos los ámbitos e instituciones de la sociedad.
Por su parte, Hernán Silva argumentó que aun cuando abordar la transversalidad de género en la educación superior implica hablar de comunidades más democráticas y abiertas, no se puede soslayar el hecho de que a veces ello no significa hablar de sociedades más igualitarias.
En ese sentido, el encargado del Área Masculinidades de la Dirección de Igualdad y Diversidad UV afirmó que hay que evaluar de mejor manera cómo se construyen, por ejemplo, las relaciones de poder dentro de las aulas, como parte de un proceso pedagógico que fomente el identificar las diferentes categorías y cómo las viven o expresan las diferentes personas.
Posteriormente, los expositores reflexionaron sobre los tipos de acciones o estrategias que podrían generar mejores condiciones para incorporar la transversalización del enfoque de género a nivel curricular.
En esta línea, Pamela Soto dijo que este marco requiere de un período de sensibilización, de formación en este ámbito específico y, luego, de un proceso de acompañamiento que permita generar alianzas y cambios para motivar o provocar los avances necesarios.
Yasna Pradenas, en tanto, enfatizó en la importancia de procurar el cuestionamiento en el ámbito educativo, más allá de generar una modificación de currículo, para hacer que ello se mantenga y se haga sostenible en el tiempo. Esto último, precisó, es clave porque aun cuando el papel puede contener todo, en el aula se da otra cosa. Por tanto, hizo hincapié en cómo abordar el currículo oculto y las relaciones de poder, incluso entre las mismas mujeres y cómo se representan y se llevan a la práctica ciertas narrativas.
Como complemento de lo anterior, Hernán Silva mencionó que entre las acciones que podrían generar mejores condiciones para incorporar la transversalización del enfoque de género a nivel curricular, la tarea de generar un cambio dirigido en todos los estamentos resulta vital para evitar lo hegemónico. A modo de ejemplo, mencionó el objetivo de identificar los distintos tipos de masculinidad, como una manera de evitar los bloqueos hacia quienes no comparten esa visión o práctica cotidiana.
La conversación concluyó con una breve comentario de cada uno de los panelistas sobre los obstáculos y desafíos que en la actualidad existen para implementar la transversalidad. Entre ellos, mencionaron las barreras y resistencias que surgen entre docentes, estudiantes, padres y apoderados respecto de procesos como este, principalmente derivados de lo que en general entienden por categoría de género. Asimismo, coincidieron al señalar que no se puede avanzar si no se incorpora a las masculinidades, no se promueve la democratización ni se pone atajo al negacionismo, que muchas veces es la piedra de base de la exclusión o separación.
Como desafíos mencionaron, a la vez, la necesidad de mostrar la condición o categoría política del tema, fortalecer la pedagogías feministas desde una perspectiva crítica y dialógica que cuestione el actual saber e invite a repensar el formato educativo vigente, entre otros.
La actividad tuvo lugar en el Campus de la Salud de Reñaca, sede de la Facultad de Medicina, y estuvo encabezada por las directoras de las escuelas de Enfermería y Educación Parvularia, Paulina Gundelach y Gudrun Marholz. Asistieron además, entre otras autoridades, la directora de Igualdad y Diversidad UV, Karin Berlien, y la coordinadora de la Unidad de Gestión Curricular y Desarrollo Docente, Claudia Schiattino.