*Actividad fue convocada por Unidad de Igualdad y Diversidad y Vicerrectoría Académica.
Con una muy buena participación, la que se mantuvo por las cerca de tres horas que se prolongó la actividad, contó la segunda parte del Taller de Transversalización de Género en el Currículum, “Reflexiones sobre una educación de emergencia desde el enfoque de género”, desarrollada en el Campus San Felipe de la Universidad de Valparaíso, organizada por la Unidad de Igualdad y Diversidad y la Vicerrectoría Académica.
Según señaló Soledad Narea, directora del Campus San Felipe, “el objetivo del taller fue profundizar en la idea de que los participantes adquieran herramientas conceptuales y técnicas que les permitan incorporar el género como eje transversal de su labor de enseñanza e investigación en cada una de las carreras que se dictan en San Felipe”.
Añadió que la instancia “se enmarcó dentro de las actividades de formación desarrolladas por la Unidad de Igualdad y Diversidad en coordinación con la Vicerrectoría Académica el año 2019, y estaba pendiente esta segunda parte para nuestros académicos”.
Destacó Soledad Narea que “en general los académicos del Campus valoran enormemente que estas instancias se hagan extensivas a San Felipe, pues les brindan herramientas concretas y efectivas para enfrentar la docencia con enfoque de género”.
Respecto de si se proyecta realizar más talleres de este tipo, afirmó la directora que “nuestra idea es continuar generando estos espacios de formación en coordinación con la Unidad de Igualdad y Diversidad o a partir de iniciativas locales”.
Docencia en contextos de pandemia
Por su parte, Javiera Arce, secretaria ejecutiva de la Unidad de Igualdad y Diversidad y expositora del taller, indicó que este “se desarrolló en un contexto virtual porque no tenemos la posibilidad de hacerlo presencialmente, entonces las y los académicos del Campus San Felipe decidieron participar vía on line. La experiencia fue bastante buena, porque se dieron espacios para reflexionar acerca no sólo del sexismo, sino que también sobre las formas de hacer docencia en contextos de pandemia, incluso ocupando los medios sociales, que en este caso sería el Zoom”.
En cuanto a lo que significa hacer clases a través de medios no presenciales, indicó Javiera Arce que “todavía hay mucho para pensar en estas pantallas negras que se ven, en cómo a veces los estudiantes se conectan porque sí y no son capaces ni siquiera de generar alguna interacción con el académico o académica que está al frente. Pero, por otro lado, también se han dado cuenta de que hay una persona detrás del académico o académica o del estudiante que asiste a esta clase, que tiene un gato, que tiene un hijo, etcétera, y ha servido para desmitificar bastante este asunto”.
Destacó que “este taller nos permitió reflexionar también sobre los desafíos de ver la enseñanza, la academia, la política que hay detrás del aula, y cómo los avances científicos también se pueden ir observando en estas situaciones”.
Educación de emergencia
La psicóloga Rocío Veloso, quien dictó el taller, explicó que “la idea era realizar en conjunto reflexiones sobre una educación de emergencia desde el enfoque de género, pensar los distintos desafíos y problemáticas que tiene el contexto actual de educación on line en pandemia, y en el fondo los distintos desafíos que vemos desde el enfoque de género y desde la propuesta de la pedagogía feminista”.
El taller, que fue una continuación de “Introducción a una docencia universitaria con enfoque de género”, realizado en enero de este año, tuvo a juicio de Rocío Veloso entre sus puntos más interesantes “la posibilidad de aplicar conocimiento respecto a mirar el aporte de la pedagogía feminista y la posibilidad de ir pensando en cómo vamos transformando las situaciones de desigualdad que enfrentamos, pero considerando nuestra subjetividad, el rol que juega nuestra historia de vida, nuestras experiencias actuales y nuestra identidad, y entendiendo que identidad siempre es algo que depende y va jugando un rol en cómo se va negociando el poder en los espacios en los que uno participa en la sociedad. En este caso, es ver qué pasa en el aula con los poderes y con la autoridad, y cómo eso influye en el aprendizaje y la enseñanza”.
La psicóloga destacó asimismo la importancia de “haber conocido las prácticas docentes, ya que las y los profesores pudieron contarnos experiencias, en las que por ejemplo consideran la emocionalidad dentro de la evaluación del desempeño en cursos de práctica profesional. Hubo ahí una evaluación formativa, cómo van pensando distintos temas, por ejemplo, relativos a carreras del área de la salud y del área médica, respecto por ejemplo a la corporalidad, al cuerpo, el cómo existe la conciencia de las distintas temáticas de desigualdad que aparecen en la docencia al hacer clases en este contexto”.
Al respecto, dijo, “fue interesante conocer experiencias sobre, por ejemplo, las dificultades que ven en la participación de algunas y algunos estudiantes, el tema de que algunos de ellos y ellas no se muestran en las sesiones on line, y haber problematizado el que la clase se cuela en lo doméstico, en nuestra vida privada. (…) Apareció el tema de la desigualdad social, que las clases en el contexto virtual van visibilizando, y cómo este contexto se transforma en una oportunidad de generar una enseñanza humanizante, y también una dificultad en tanto se pierde el contacto personal, la presencialidad en la enseñanza”.
Otro punto destacado por Rocío Veloso fue “que se pudo ver la relación entre una perspectiva pedagógica que tiene ciertos principios, como la pedagogía feminista, que marca una diferencia respecto de pensar sólo desde el enfoque de género y de lo metodológico: tiene que ver con el sentido del proyecto educativo en el que trabajamos, el sentido de universidad, qué tipo de persona estamos formando. (…) Aprendimos mucho en este intercambio, en esta reflexión, y con ganas de seguir desarrollando otras ideas, y de compartir con otras y otros docentes. Fue realmente una instancia muy bonita”.